dissabte, 22 de desembre del 2012

Los enemigos del alma sí son tres



.
-¿Comorrr? 


* * *

Querido lectorado :-)  
.
Pues sí, pues sí, es así. Veamos: 
Uno, el Mundo.

El Mundo, si, el peor y más peligroso de todos nuestros enemigos (y no me refiero tan sólo al rotativo español de tal nombre, jajajajaja, ¡¡ aunque déjalo correr !! ), porque, "intrínsecamente", tampoco es que sea malo ni bueno, ni es ese su mayor problema, si bien tampoco el más pequeño. 

No, el mayor problema que supone el mundo para nuestra Alma es su capacidad "de arrastre", de "cosificarnos", de "costituirnos" (como diría mi estimado García Calvo), conducirnos por senderos paulatinamente más y más apartados de la frescura, la espontaneidad y la desprendida bienintencionalidad o generosidad, encasillándonos, en cambio, si queremos pertenecer a la por tantos y tantas ansiada categoría de "normalidad", en toda una serie de rígidas, inamovibles estructuras o concepciones mentales, bien, meramente memorísticas, en realidad, basadas fundamentalmente en la acrítica repetición por parte de unos y otras de que el Sol sale por Occidente, por decir algo. 

Así es, ni la Hipnopedia de Aldous Huxley en Un Mundo Feliz conseguiría unos resultados tan apisonantes, tan lapidatorios de la genuina y propia verdadera Vida de nuestras almas, la Vida espiritual, compuesta tanto por la vertiente intelectual como la de la afectividad, la que, globalizando ambas, nos define como humanos y no como máquinas o mero ganado.  

Esa entonces estúpidamente perseguida "normalidad" se logrará, por lo tanto, a costa de toda nuestra flexibilidad mental, nuestra capacidad de encaje de enfoques o alternativas originales pero hasta sabias, de Vivir, en resumidas cuentas la Vida, en lugar de transitar por ella vegetativamente repitiendo día tras día prácticamente una y otra vez idénticas e irreflexionadas, mecánicas pautas de conducta. 

Por lo tanto, no cabe sino estar en alerta permanente contra ese "Mundo", que no es sino el mundo de la Muerte Psíquica y de la Inanición mental, lo peor que, como humanos, nos puede pasar. Y el peor, desde luego, de los pecados posibles contra el Espíritu Santo: practicar su negación, nuestra obvia diferencia respecto a todo cuanto nos rodea. 

Los pecados contra la Razón, esos y no otros, son los "pecados contra el Espíritu Santo" en nuestra "versión" como humanos, y los únicos, recuerdo, que carecen de perdón posible, ni por parte de ningún dios, ni siquiera por parte de quien los cometió.  


Dos: el demonio 

Que, por supuesto, nada tiene que ver con ningún señor con pezuñas y cuernos, sino que el demonio, simplemente, no es sino el conjunto o la recopilación de todas las maldades humanas habidas y por haber, pero que, en realidad, carece de poder intrínseco alguno sobre nosotras y nosotros, porque, con ignorar ese acervo de maldades, y centrarnos en obrar el bien, asunto archirresuelto. 

O sea, que no hay más demonio real que las barbaridades provocadas por los propios seres humanos, y la defensa de esas atrocidades, no hay tal Satanás personificado atisbando siempre por aquí y por allá en busca de poseer nuestras almas, porque su posesión, en todo caso, acabará con nuestra vida aquí, puesto que él, tal y como lo he definido, sí que está bien e inextricablemente "ligado y bien ligado" a nuestras acciones en este mundo material que en ocasiones definimos como la Realidad de Consenso, y no a ninguna otra cosa. 

Pero, claro, luego hay idiotas que se hacen satanistas, a lo mejor hasta sin saberlo, y efectivamente construyen constructos, en sus mentes y en sus vidas, y porfían en extinguir una y otra vez lo que a todas luces es imposible bajo las leyes ordinarias y comúnmente aceptadas de la Física... 

En fin, que como quedó demostrado en su momento, idiotas y subnormales los hay bajo cualquier profesión, esto es lo que debemos de tener siempre muy en cuenta, pues sí que pueden hacer, y lo hacen, el Mal, y pueden llegar a matar a buenas personas (no me digáis que ello es para vosotros o vosotras una gran novedad), aunque afortunadamente no sea lo habitual... pero porque casi siempre fallan, ojo, no porque no lo intenten constantemente :-|||  


y Tres: la Carne 

Y si bien es verdad que no todas se toleran o nos contaminan el alma por igual, el hecho cualitativo, en sí, es independiente de que tal carne sea de pollo, de ternera o de algún pescado: nuestros organismos están preparados así, y si ingerimos dosis de carne superiores a las que pueden ser el estándar de una especie simia y omnívora como la nuestra, padeceremos males físicos sin cuento, pues, salvo la de otro ser humano y vegetariano, la carne de cualquier animal contiene sustancias o productos que, aunque puedan ser buenos para ellos, son directamente toxinas para nuestro organismo. 

Pero ya no sólo, ni principalmente, se trata de eso. No, lo más grave de todo es que se irá envenenando y contaminando también nuestra alma por esa ingesta excesiva de algo procedente del orden cósmico inferior y más rastrero de todos, el mundo animal, provocando cosas animalescas y hasta depredatorias, como que la gente se vuelva más agresiva, más territorial, más endogámica y menos social, siempre desconfiada y hostil ante el extraño en lugar de la amabilidad y la generosidad que nos habrían de caracterizar. 

Y hablando de la carne, ¡vaya una idiotez!, denotadora de una mentalidad en el fondo súper retrógrada y atrasada, estancada en el pasado, eso de preguntarle a alguien que ha proclamado que no come carne aquello de "¡¡ pero pescado si que comerás !!", entre alarmados y escandalizados, y como si lo que se come de los pescados, mariscos y demás no fuera, a todos los efectos, carne de procedencia animal como cualquier otra. 

Sí, aquí es donde se lució la Iglesia Católica... o donde introdujo el GRAN ENGAÑO con el que nos mantiene atrapados, aún, bajo su férula cómplice de la criminalidad que, desde el punto de vista tanto del Universo como del ParaUniverso, invade cada vez más estos nuestros mundos por donde transitamos. Y ya es normal que suceda así si, por esa férula, y por ser de por sí los humanos adultos gilipollas, no se juega debidamente con el juguete mágico que da relajación y placer, endorfinas, pero también Amor y Conocimiento, justo las dos cosas de que anda más falto en todas sus dimensiones ese tan horripilante como desalmado "género" adulto.  


Y ya está: ¿ven como tampoco era para tanto (que no para tontos) la cosa? La Iglesia Católica, la Cristiana, y las tres Monoteístas en general, son todas cómplices del mismo y criminal engaño, y todas trabajan para nuestros enemigos, materiales y paraUniversales, al tiempo que para el "demonio", tal y como se ha definido este último concepto en su epígrafe o apartado específico, el número dos :-D  


fraternales saludos parauniversales :-)  
ET y su alma inmortal & forrest gump. 
.. 


. 
. 

* * * * * * * *** * 
..... 
. 

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada